Aunque el origen de halloween es lejano a nuestras raíces culturales, Colombia no es ajena a esta celebración y cada 31 de octubre podemos ver en nuestro país a miles de niños salen a pedir dulces entonando cantos en los barrios o en las zonas comerciales.
Niños felices acompañados por sus padres, que últimamente también están saliendo disfrazados, van por calles y pasillos con sus calabazas de plástico recogiendo dulces y disfrutando en familia de esta noche especial.
Esta celebración de Hallowen es un excelente motivo para compartir en familia y para que nuestros niños vivan una fiesta segura, en compañía de sus padres o de adultos responsables, es muy importante no dejar a los niños solos.
¿Y cómo es en Colombia?
El canto clásico de los niños dice así: Triqui-Triqui, Halloween, quiero dulces para mí… y si no me das, te rompo la nariz. O también: y si no tienes para mí, se te crece la nariz. Si entregan dulces, se considera que han aceptado el trato.
En Colombia está lejos de asociarse con el día de los muertos y es una celebración pacífica y divertida para nuestros niños.
Hallowen es una celebración que cada vez coge más fuerza en Colombia y cada vez se celebra más, involucra la familia, los amigos, los vecinos y hasta a las empresas. Los atuendos y los maquillajes suntuosos, fastuosos y especiales están a la orden del día. Cada año se añaden novedosas costumbres como disfrazar a las mascotas, en particular, perros y gatos. También se decoran con el tema centros comerciales y almacenes en general y es divertido cómo el otoño y sus colores entran a ciudades como Cali y se reflejan hasta en las casas.
Halloween se ha convertido en un evento publicitario que aprovechan muy bien los comerciantes, sobre todo aquellos que venden y alquilan disfraces y elementos para fiestas, y por supuesto, la industria de dulces y chocolates.
No existe una estadística real, pero algunos comerciantes dicen que el 25% de las personas en Colombia, se disfrazan en esta fiesta.