Cada mujer tiene señales diferentes del trabajo de parto y lo experimenta de distinta manera. Algunas señales de trabajo de parto pueden ser las siguientes:
Pérdida del tapón mucoso. Es posible expulsar por la vagina un goteo o un chorro de una pequeña cantidad de secreción de moco mezclada con sangre. Esto indica que el cuello del útero ha empezado a dilatarse y que la mujer está en trabajo de parto, aun cuando el trabajo de parto activo puede demorar, si no comienza después de 24 horas, se debe hospitalizar e inducir el parto.
Es muy importante comunicarnos de inmediato con el médico o ir al servicio de urgencias cuando esto pase.
Contracciones. Los espasmos musculares uterinos se presentan con intervalos menores a diez minutos y pueden durar de 30 a 70 segundos de duración, y se van volviendo más frecuentes e intensas cuando va avanzando el trabajo de parto. Sin importar lo que haga, no se detendrán. Estas contracciones se irradian hacia la región lumbar y hacia la parte superior del abdomen.
El abdomen lucirá más bajo y será más fácil respirar porque el bebé ya no hace presión sobre los pulmones.
Podrá orinar con más frecuencia porque el bebé presiona la vejiga o podrá ir más seguido a evacuar los intestinos, pudiendo ser las heces más sueltas de lo normal.
¿Cuánto tiempo dura el trabajo de parto?
El trabajo de parto es diferente de mujer a mujer, para las primerizas puede durar desde unas horas a varios días. En la mayoría de las ocasiones en los partos siguientes, la duración del trabajo de parto es menor.
¿Qué debemos hacer durante el trabajo de parto?
Lo mejor es tratar de mantenernos relajadas hasta que las contracciones aumenten de frecuencia e intensidad. Puede ser bueno escuchar la música que nos gusta o usar las técnicas de relajación y respiración que nos hayan enseñado.
Estas son algunas sugerencias para acelerar el trabajo de parto:
- Cambiar de posición con frecuencia
- Hacer una caminata
- Darse un baño largo y relajante